
¿Más hojas, mejor calidad?
La calidad de un trabajo escrito no se basa en la cantidad de hojas sino en la capacidad de resolver dudas y llenar los vacíos de conocimiento. Es así como se satisfacen las expectativas. Un informe puede tener mil hojas y sin embargo puede ser pésimo. En cambio, uno con menos extensión de hojas (unas 200) sí puede cumplir su objetivo. ¿Por qué? Esta situación, muy común empresas, universidades y hasta en colegios, se debe a tres errores comunes: - No tener información sufici